Ante la crítica situación económica, el sector comercial de la capital de Itapúa espera por medidas que permitan mitigar el efecto devastador de la pandemia.
Tras diez meses enclaustrados, el comercio encarnaceno se encuentra agonizante, principalmente por el bloqueo del puente internacional San Roque González de Santa Cruz. De esta forma se refirió Mirtha Montiel, presidenta de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Encarnación (Cacise), a la situación que se vive actualmente en la capital de Itapúa. Sin embargo, señaló que la recesión económica en esta zona fronteriza comenzó antes de la pandemia, a consecuencia de la devaluación de la monedad argentina.
Recordó que el 90% de las ventas generadas en el circuito comercial de Encarnación dependen exclusivamente de los visitantes que llegan desde Posadas, Argentina. Con el cierre de la frontera, la situación se agravó de manera considerable. Cerca de 1.000 comercios se vieron obligados a cerrar sus puertas, lo que generó un nivel de desempleo alarmante. Subsidios y créditos Para afrontar esta situación, se planteó un proyecto de ley que comprende la entrega de subsidio a unos 1.200 comercios de la zona, explicó la presidenta de la Cacise. “Nosotros pedimos tres pagos de 3.000.000 de guaraníes”, agregó.
Otro aspecto que preocupa al sector está relacionado a las propuestas crediticias. Montiel señaló que, en muchos casos, el tiempo de gracia contemplado con el Fogapy ya venció el pasado 30 de noviembre. Es decir, las mipymes que accedieron a préstamos bajo esta herramienta ya deben comenzar a pagar las cuotas, sin embargo, el movimiento comercial es prácticamente nulo. “Queremos que se posponga. También pedimos nuevas líneas de créditos, con mayor tiempo de gracia porque aquí se avizora todavía un largo tiempo de recesión”.
HABILITACIÓN DE LAS PLAYAS
El analista económico, Stan Canova, comentó que la situación del sector comercial de Encarnación es realmente critica, ya que considera que el gobierno de Argentina no tiene apuros para reabrir sus fronteras. “Antes de la pandemia, para Posadas, Encarnación era el enemigo, ya que todos los posadeños pasaban al lado paraguayo a realizar sus compras”. Canova señaló que el nulo movimiento comercial en la capital de Itapúa desemboca en problemas financieros, con altos niveles de mora y empresas que se encuentran imposibilitadas a saldar las cuotas de sus préstamos. En la ciudad, donde el turismo tiene un importante impacto en el movimiento comercial, se espera también la apertura de las playas. Par ello se realizó un trabajo multidisciplinario para establecer un protocolo sanitario de protección y un sistema de agendamiento. “Aquí se tienen en cuenta todos los factores. Se está haciendo un excelente trabajo en las playas, por lo que creemos que se tendrían que habilitar”, expresó Montiel. La presidenta de la Acise resaltó que la capital de Itapúa es una ciudad ordenada y segura. En ese sentido, señaló la necesidad de mayor promoción para atraer a inversionistas que puedan instalarse en la zona y generar mano de obra.