Diariamente millones de personas son las que deben mantenerse sentadas por más de ocho a diez horas en la oficina, lo que trae consigo hábitos poco positivos para disfrutar de una vida saludable.
L os trabajadores de oficina suelen enfrentarse a múltiples horas sentados en sillas poco cómodas o cuya ergonomía no se adapta totalmente a la fisionomía de sus vertebras, lo que suele provocar dolores de espalda que derivan en lesiones de columna, entre otras afecciones. Un sinfín de horas sentado frente al ordenador, con luz artificial y respirando el aire que sale del sistema de ventilación. Esta es la situación a la que se enfrentan diariamente miles, millones de personas durante su trabajo.
Las condiciones laborales se han modernizado y el avance, además de las consiguientes mejoras, afectan directamente a la salud del empleado. Problemas comunes, como dolor de espalda o alteraciones de la visión, y otros no tan habituales, como lipoatrofia semicircular, son trastornos que parecen estar relacionados con el entorno de la oficina. Lipoatrofia semicircular: Este trastorno, que consiste en una alteración de la grasa subcutánea situada en las piernas, parece estar relacionado con ciertas condiciones ambientales del entorno laboral. Una excesiva electricidad estática y la falta de humedad son los factores que podrían favorecer la aparición de unos surcos en los muslos de los trabajadores que, una vez eliminadas las causas, desaparecen sin dejar huella.
COMPUTADORA Y EL TELÉFONO EN SU SITIO
La ubicación de los útiles de trabajo es también otro factor muy importante a la hora de ocasionar o prevenir más de un problema, no solo en la espalda. El 58% de los españoles sufre molestias oculares leves. De estos, el 38% no se trata porque desconoce los tratamientos disponibles. Se aconseja parpadear a menudo, mirar lejos periódicamente y reducir el tiempo de concentración en una actividad. La distancia del ojo al ordenador debe ser de 50- 60cm, es decir, que la pantalla pueda tocarse con el brazo y la mano extendida.
El monitor no debería colocarse sobre el PC ya que la pantalla no debe estar más elevada que el nivel de los ojos sino que debe quedar a unos 10-20º bajo los ojos. Fijar la vista durante mucho tiempo sin descansar deriva en una reducción del ritmo de parpadeo y en una menor cantidad de lágrima lo que conduce a una mayor sequedad ocular. Aquellas personas que pasan mucho tiempo delante del ordenador pueden desarrollar el denominado ‘síndrome de pantallas de visualización. Y es que de un parpadeo normal, de 25 movimientos por minuto, se puede pasar a otro de siete movimientos al minuto. Todas estas prácticas son altamente nocivas para la salud, se debe buscar el mayor confort para el día a día en la oficina en busca de gozar una vida realmente saludable.