Desde 1987, Paraguay y la República de China (Taiwán) realizan “Conferencia sobre la Cooperación Económica”. Este espacio es una plataforma para intensificar los vínculos comerciales bilaterales.
En este escenario, en el 2018, se incorporó el Comité Conjunto del “Acuerdo de Cooperación Económica”. El propósito es reforzar el delineamiento estratégico fundamental de cooperación comercial e industrial para buscar un mayor acercamiento de productos del Paraguay al mercado taiwanés y atraer inversiones hacia el Paraguay.
Las reuniones son fructíferas y con ellas se logran importantes resultados. En el rubro de la carne vacuna, el incremento fue significativo con una expectativa de llegar a ser el tercer destino de la proteína roja del Paraguay a Taiwán para el año 2020.
A partir de septiembre del 2019, cuando se eliminaron los aranceles al sésamo para – guayo, la exportación de este producto del Paraguay a Taiwán supera al mismo producto de Bolivia y Brasil, en el primer cuatrimestre del año, con miras a ser una exportación importante de Paraguay a Taiwán en el futuro.
Otros productos, como el té, mate, azúcar, jugos y un total de 85 artículos paraguayos que, gracias a la eliminación de aranceles, es decir arancel cero por parte de Taiwán, tienen el mismo resultado. Todo esto se proyecta hacia dicho mercado y se canaliza por la plataforma.
Taiwán nota que en el Paraguay existen varios rubros potenciales a desarrollar por parte del sector privado e in – vitan a los sectores a incluirse a la plataforma a nivel gubernamental. De esta manera se podrá encontrar una forma de cooperación que profundice la relación comercial existente entre nuestros dos países.
El Gobierno y el empresariado de Taiwán están abiertos a trabajar y priorizar los intereses de los productores paraguayos.
En cuanto al grano de soja, su precio y colocación de mercado lo manejan las grandes multinacionales; sin embargo, el Gobierno de Taiwán, considerándose un constante socio y aliado del Paraguay, sigue firme en adquirir dicho producto directamente al Paraguay, y en este momento está conversando con las multinacionales sobre cotizaciones en términos de exportación.
Es importante recordar que el comercio internacional está sujeto a la práctica y regulación de la Organización Mundial de Comercio (OMC) para que genere beneficios justos a las partes. La intervención, o condicionamiento político, distorsiona el mercado y está en contra del espíritu de la OMC.
