Los nuevos emprendedores abandonan ciertos hábitos saludables debido al exceso de trabajo que conlleva levantar un negocio. A largo plazo esto puede generar problemas físicos y mentales.
Largas horas frente al ordenador, pocas horas de sueño o saltarse las comidas son algunas de las costumbres más practicadas. La mayoría de veces se olvida que la principal herramienta de trabajo para un emprendedor es su propio cuerpo. Volver a incorporar a la rutina diaria hábitos más saludables puede ser un proceso lento. Con una serie de cambios sencillos se puede cuidar de la salud y emprender al mismo tiempo.
Se ha vuelto un hábito bastante común el no dormir las horas suficientes. Según diversos estudios, dormir de 7 a 8 horas seguidas es lo ideal. No es recomendable saltarse los periodos de descanso. Dormir tiene el mismo nivel de importancia que una reunión o una llamada telefónica. Al concluir la jornada laboral es importante desconectarse del trabajo.
Dedicar las 24 horas del día al trabajo no es bueno, buscar una distracción o un hobbie en las horas libres ayudará a la mente a liberar preocupaciones. Mirar series, practicar deporte o pasar tiempo con amigos son actividades beneficiosas, las distracciones sanas ayudan a incrementar la productividad en el trabajo.
Una alimentación adecuada con una correcta ingesta de vitaminas y minerales es la combinación perfecta para tener un buen desempeño en el día. No es necesario seguir dietas estrictas pero si es importante dejar de lados ciertos alimentos como las gaseosas y grasas en porciones desmedidas. Respetar los horarios de las comidas y las cantidades son algunos de los pequeños cambios con los que se puede comenzar.
Otro enemigo recurrente de los emprendedores es el estrés. Este está presente en la mente al momento de no hacer una real desconexión de los pendientes de la empresa. Existen muchos tips que ayudan a reducirlos, uno de ellos es tomar descansos entre las actividades para volver a concentrarse. Al cuidar el cuerpo se protege a la empresa. Ser empresario es una tarea demandante y no estar 100% saludables pueden afectar las actividades diarias.
OTRAS ALTERNATIVAS
- Descansar las horas suficientes • Establecer rutinas y horarios • Mantener una buena alimentación • Realizar actividades deportivas • Dedicar tiempo a uno mismo • Aprender a delegar responsabilidades
